viernes, 26 de noviembre de 2010

Santa Cruz Trek en 2 días

Tenía todo lo que me había sobrado de Huayhuash, así que me fui a hacer el Trek de Santa Cruz en la cordillera Blanca, dicen que se tarda entre 3 y 4 días pero a mi a pesar del tiempo, me resultó fácil de hacer y lo terminé en dos. A continuación los detalles de como lo hice.
Decidí realizarlo al revés que la mayoría de los tours, ya que comenzaba por la parte más cercana y me daba más chances de terminarlo antes (además dicen que es más fácil), así que me tomé una combi desde Huaraz a Yungay (PEN 5, 1hs), de ahí a las 8 sale otra hasta Vaquería (la misma que va a Cebollapampa para Laguna 69, PEN 12, 3hs en este caso).
Punta Unión, Santa Cruz Trek, Cordillera Blanca, Perú
Para ingresar al Parque Nacional Huascarán y hacer los treks, hay que pagar una entrada de PEN 65, que dura un mes e incluye todas las actividades en el lugar, por lo que si uno piensa ir a hacer alguna caminata al parque nacional (Santa Cruz o Alpamayo) o visitar Laguna 69 o Laguna Churuc, conviene adquirir el ticket con anterioridad en Huaraz (o al visitar el primer sitio), así no se pagan entradas individuales.
Ya desde Vaquería comencé a caminar a las 11.30, es fácil preguntando, pero se baja a hasta cruzar el rió, se bordea una montaña a mano izquierda y se atraviesa el pueblo de Huaripampa, donde se cruza el río y se arranca en el camino que trepa a mano izquierda. Por suerte en este parque nacional si está todo señalizado, y la gente igualmente es muy amable en darte explicaciones y consejos de como continuar. Así que caminé alrededor de unas dos horas y media por un terreno bastante plano y llegué hasta el primer campamento, el de Paria. Era muy temprano y había comenzado a llover una hora antes, así que como estaba algo mojado decidí seguir para adelantar camino hasta otro lugar de acampada. Continué otras dos horas y media, por un recorrido que comienza a trepar pero que no es nada duro comparándolo con Huayhuash y llegué hasta las lagunas. Al no encontrar el camping oficial que marcaba mi mapa, y porque eran alrededor de las 5 de la tarde decidí acampar al lado de la Laguna Morococha, justo antes de la subida a Punta Unión, el único paso que hay en todo el recorrido.
Mi carpa / tienda me da mucho problemas de condensación en temperaturas bajas, así a pesar del frío dormí con algunas ventilaciones abiertas. Mi sorpresa fue al día siguiente al levantarme a las 4.30 antes del amanecer, tenía parte de la carpa congelada por dentro (por mi condensación) y por fuera por al humedad y el rocío. Así que con algo de frío desayuné esperando a que descongele, y antes de que dieran las 6 estaba de nuevo caminando entre la niebla que no levantaba y no dejaba disfrutar de los nevados que vi el día anterior.
Subí y atravesé Punta Unión (4760 mts) y desde ahí, además de mejorar el tiempo y las vistas, el camino es muy sencillo, o cuesta abajo o siguiendo valles o pampas como las llaman ellos. Antes de las 9 ya había pasado Taullipampa, y seguí el recorrido haciendo algunas paradas para comer y fotos atravesando las lagunas de Jantunchocha, Ichiccocha para llegar antes de las 13hs a Llamacorral. Me pasó lo mismo que el día anterior, era muy temprano, pero en este caso no llovía, así que como se bordea un río y a hay agua de sobra por si fallaba algo, decidí intentar terminar la caminata ese día, para ahorrarme una jornada, que no me venía mal. Entonces caminé otras dos horas y alrededor de las 3 ya estaba en Cashapampa. El colectivo venía más tarde (Sale PEN 8), pero había un taxi compartido por PEN 10 que tarda sólo una hora hasta Caraz, entonces decidí tomarlo, y desde Caraz una combi a Huaraz (PEN 6, 2hs). Ya en el hostal a descansar y preparar todo antes de irme para Trujillo.
Durante el recorrido se pueden hacer algunos lugares alternativos como ir al campo base del Alpamayo, Laguna Quitacocha o la Quebrada de Ramincuray. Pero en mi caso quería hacerlo rápido y crucé a un grupo que sus guías me comentaron que no subieron al campo del Alpamayo porque no había visibilidad, aunque puede ser una alternativa para tener en cuenta.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

4 días por Huayhuash

Dicen que recorrer la cordillera Huayhuash es uno de los mejores trekkings del mundo. Como comentaba en la publicación anterior era Noviembre, y al ser la época de lluvias no es el mejor momento para ir a la zona, pero estaba en Huaraz, nunca se sabe si uno va a volver, así que aunque no iba a ser fácil tenía que intentarlo.
Laguna Carhuacocha, Cordillera Huayhuash, Ancash, Perú
Primero intenté preguntar por grupos organizados pero o los precios me parecían muy caros o nadie los terminaba formando, así que como tenía todo el equipo compre comida para los 8 o 9 días y salí sólo, sin arriero, ni mula ni nada, cargando alrededor de 17 kilos en la mochila. Lo único fotocopié un mapa topográfico color y seguí las instrucciones y consejos que me dio la gente de Andean Sky (www.andeanskyexpeditions.com) y los nombro por lo amables que fueron. Creo que si armaban grupo, era muy probable que hubiera hecho el trek con ellos.
Así que con todo preparado partí a las 5 de la mañana en bus desde Huaraz a Llamac (PEN 25, 5hs), al llegar a esta población, ahí comienza el primer día de caminata, que es fácil y poco atractivo. La gente muy amablemente te va indicando el camino, pero simplemente siguiendo una carretera hacia el Este primero se pasa por la población de Pocpa, luego por una mina, siempre bordeando el río Llamac, para llegar luego de unas 4 horas y media a la zona de campamento de Quartelhuain.
El segundo día se empieza subiendo un paso entre montañas, donde comienzan las vistas tan buenas que hay de la cordillera, luego se baja hasta llegar a unas casas que conforman la población Janca y de ahí, pese a que no paraba de llover o caer pequeño granizo decidí ir hacia el Oste hasta Laguna Mitochocha que queda a unos 40 minutos. Llegué ahí (se puede acampar en el lugar), vi parcialmente las montañas nevadas de fondo entre las nubes y después de comer algo decidí seguir hasta Laguna Carhuacocha, así que volví hasta Janca y camine hacia el sur unas 3 horas y media o cuatro. Al llegar al primer campamento (no sabía que había un segundo en la comunidad siguiente) no había agua, así que bajé hasta una playa frente a la laguna donde acampé, con el espejo de agua delante y las montañas nevadas de fondo, impresionante, el mejor paisaje donde dormí en toda la travesía. En total fueron alrededor de 8 horas y media en toda la segunda jornada y como decía antes comenzaron, cuando las nubes los dejaban ver, se disfrutaba aunque sea parcialmente de paisajes realmente muy buenos, con la cordillera y los nevados de fondo.
El tercer día fue el mejor de los cuatro por paisajes, luego de bordear toda laguna Carhuacocha me fui recorriendo el camino que pasa por los lagos Gangrajanca, Siula y Quesillococha, donde almorcé y después de disfrutar un poco del entorno comencé a subir por el camino del paso que hay que atravesar (4800mts) , justo en ese momento empezó a llover y con la altura esto se fue transformando en nieve. Luego de pasar la parte alta seguí hasta Huayhuash donde acampé y me crucé con otro turista, un Irlandés que estaba como yo, con todo mojado después de tres días (cuatro en su caso) y sin 10 minutos de sol para secar todo. Esta jornada, en total fueron en total alrededor de 7 horas.
El cuarto día teníamos que seguir la ruta hasta lago Viconga, son alrededor de 4 horas y hay que acampar ahí ya que al día siguiente hay que atravesar un paso de 6000 metros (paso Cuyoc) y en un día dicen que no se puede hacer. Además de que en la zona hay baños termales para relajarse....claro, si hay sol. Como solía llover menos a las mañanas y nos lo habían aconsejado, salimos como siempre alrededor de las 6 de la mañana, entonces antes de las 10 ya estábamos en Viconga. Para variar la mitad del camino estuvo nevando o lloviendo, sumando a que se me empezó a descoser y romper parte de la mochila, que cada día en lugar de pesar menos, pesaba mas por llevar cosas mojadas. Entonces como Viconga tiene un punto de escape hasta Cajatambo, pero ya a partir de ahí hay que terminar el circuito hasta Llamac, el Irlandés iba a salir, y no sabía si venían más turistas detrás, me pareció bastante tonto seguir y salí con él. Además si se me rompía la mochila, la iba a tener que llevar con los brazos por 4 o 5 días y no lo veía muy cómodo.
Así que seguimos caminando otras 8 o 9 horas hacia el suroeste, por un valle entre pampas, como las llaman por acá, bordeando el río Pumarinri que a veces formaba cascadas entregando unas vistas bastante buenas. Y siempre descendiendo en altura, dejando atrás la cordillera y los nevados. Llegamos a Cajatambo un poco antes de las 7 de la noche, conseguimos alojamiento, ducha caliente y ya limpios cenamos algo y al otro día a las 6 nos tomamos el bus hacia la ruta (PEN 20, 5 horas) y de ahí otro (Pen 20, 4 horas) hasta Huaraz.
La verdad es que como decía antes, aunque el clima no era el mejor, estando en la zona, tenía que intentar hacer Huayhuash. Igualmente los paisajes con las montañas de fondo, cuando los podía ver, me parecieron espectaculares, ni me imagino lo que debe ser eso con buen tiempo, todo despejado, el cielo azul....y caminando seco y cómodo :). Creo que si seguía no lo iba a disfrutar y estaba arriesgando además por lo de la mochila y al no saber si era el único o tenía mas turistas entrando detrás mio.
Lo único que me pareció a mi y a la gente que consulté demasiado abusivo, fue lo que hay que pagar a las comunidades. Se paga desde PEN 15 a 35 por atravesar las comunidades que bordean Huayhuash, en total son PEN 135 lo que me parece demasiado, más teniendo en cuenta que al menos de la parte que vi yo en Noviembre, en los campings sólo hay un baño abandonado, lleno de basura de otros turistas que ni se recoge (sobre todo el de Carhuacocha). En todo el recorrido que hice no hay ni un sólo tacho de basura (salvo el primer día mientras se pasa por la mina), y en 4 días sólo he visto un cartel indicando destinos en la población de Huayhuash. El resto da la sensación que es como ir dejando dinero por caminar por los senderos que utilizan de forma diaria, ya que no se ven escuelas ni nada, y si uno la piensa en temporada alta va mucha gente, dejando más de USD 40 por cabeza. Igualmente en mi caso sólo pagué 3 veces PEN 15, y una con discusión y todo, ya que inicialmente vino un cobrador falso, sin chaleco ni recibos oficiales, no le pagué y luego vino el verdadero.
Volví a Huaraz, sequé todo descansando un día y ya que tenía la comida, gas, etc. y más ganas de caminar por montaña, me fui luego a la Cordillera Blanca a hacer Santa Cruz, pero eso lo contaré en otra publicación.

En Huaraz entre cordilleras

Laguna 69, Ancash, Perú
Desde Lima me fui en bus hasta Huaraz, la cuidad es muy tranquila y todos los atractivos se encuentran en los alrededores, donde destacan las cordilleras Huayhuash, Blanca y Negra.
Sabía que Noviembre es cuando comienza la época de lluvias, y no es el mejor momento para visitar lo zona, pero estaba en Perú, nunca se sabe cuando uno podrá volver, y tenía que conocerla.
Llegué al a madrugada, dí un par de vueltas averiguando y me terminé alojando en un hostal barato entre el estadio de fútbol y el mercado central. Utilizando este sitio como base visité los siguientes lugares:
  • Chavín de Huantar: Llegué hasta Chavín en bus (PEN 10, 3 horas) al mediodía, comí algo e ingresé a las ruinas con la mala suerte de que comenzó una lluvia bastante fuerte. Aunque el tiempo no acompaño para recorrer el sitio tranquilamente, disfruté de la visita y me pareció un lugar muy interesante para conocer. Es un complejo ceremonial con más de 3400 años, lo que lo constituye en el recinto de su tipo más importante en el área Andina del período formativo. A este lugar acudían miles de peregrinos desde distintas regiones. Quizás lo particular del complejo es que en el interior cuenta con galerías, canales de drenaje utilizados para evacuar el agua de las lluvias y ductos de ventilación superpuestos en diferentes niveles. Así que entre chaparrones y bajo el agua recorrí todo el lugar, los que más me gustó, y no por estar ambos bajo techo, fue la zona de los laberintos y la Galería del Lanzón. Estos recintos se supone que servían para ceremonias de carácter restringido, o para almacenamiento. El Lanzón en si, una pieza lítica, representa la deidad principal de la sociedad Chavín, y tiene rasgos combinados entre humanos y animales. Además en el lugar se encontraban varias Cabezas Clavas (en la actualidad sólo se puede apreciar una, el resto están en el museo), que son esculturas líticas que representan cabezas humanas con rasgos felinos, es decir, el proceso de transformación del ser humana en felino, el cual se realizaba simbólicamente a través del consumo de sustancias alucinógenas. Por falta de tiempo me perdí de visitar el museo que dicen que está muy bien, no paraba de llover y justo había un bus a las 16hs entonces decidí volverme, sino tenía que quedarme esperando hasta las 20hs y regresar demasiado tarde a Huaraz.
  • Laguna 69: Es una muy buena escapada de un día desde Huaraz, hay que tomarse una combi hasta Yungay (PEN 5, 1hs), otra desde Yungay hasta Cebollapampa (PEN 10, sale a las 8hs, 1hs de viaje) y desde ahí caminar entre 2 horas y dos horas y media hasta la laguna. La vista que ofrece este espejo de agua turquesa es realmente muy buena, en la altura, con dos montañas nevadas de fondo, su glaciar y cascadas. Una de las combis para retornar vuelve a pasar alrededor de las 15 hs por Cebollapampa y se regresa a la tarde a Huaraz. Como decía antes es una muy buena escapada para un día, se puede ir a almorzar a la laguna y además la caminata se puede utilizar para irse aclimatando a la altura (algunas agencias venden así la excursión).
  • Museo Regional de Ancash (PEN 6): En la plaza de Armas de Huaraz, pequeño pero interesante y completo. Lleva algo más de una hora recorrerlo, pero tiene bastante material hallado en la zona, exposiciones temporales y un jardín lleno de bloques de arte lítica Recuay (200 al 600 a.c.).
Además de lo nombrado aquí fui a recorrer parte de la Cordillera Huayhuash y a hacer el trek conocido como Santa Cruz en la Cordillera Blanca, pero ambos recorridos los comentaré en otras publicaciones.
El tiempo no acompaño demasiado, pero ya satisfecho con lo visto me fui para Trujillo (PEN 45, 10hs), a seguir recorriendo.

domingo, 7 de noviembre de 2010

Ruinas y museos por Lima

Catedral y Palacio del Arzobispo, Lima, Perú


Después de 17 horas de viaje (PEN 90) llegué a Lima desde Arequipa.
La verdad es que la cuidad me sorprendió para bien, al menos en la parte central por todo lo que estaban construyendo, además, por supuesto, de tantos lugares históricos que tiene. Estuve caminando mucho sobre todo por la parte central, entre la Plaza Mayor o de Armas y La Plaza General San Martín. Y fui algo de visita tanto de día como de noche a Miraflores, a cenar con unos amigos al lugar conocido como la calle de las pizzas.
Entre el centro de la capital y alrededores pude visitar los siguientes puntos turísticos:
  • Museo de la Inquisición (Entrada gratuita): Antiguo centro de la inquisición en donde se pueden visitar entre otros recintos la sala donde se realizaban los juicios, con un techo realmente hermoso hecho con madera encastrada por partes, la sala de torturas y bajar hasta las antiguas celdas. Además en este edificio funcionó el primer congreso nacional, por lo que también se aprecian algunas piezas que destacan su antigua función.
  • Catedral (PEN 10): Es el tercer edificio que se construye en el terreno, el inmueble actual se terminó en 1962. Tiene un museo interno y varias capillas, pero como particularidad, en una de ellas se encuentra el actual sepulcro de Francisco Pizarro, conquistador y fundador de la ciudad. Se traslado su cadáver en 1891, pero recién en 1977 se descubrieron sus verdaderos restos en la cripta de la Catedral y fueron reemplazados por los que ocupaban su lugar. Contiguo se encuentra el Palacio del Arzobispo, que no visité pero tiene un arquitectura muy fina y particular.
  • Convento de San Francisco (PEN 7, no se permiten fotografías): Otro de los lugares emblemáticos de la ciudad, Es el primer convento Franciscano en el Perú, data del Siglo 16 y es un lugar muy interesante para conocer en su interior. Además de todos los recintos que tienen la mayoría de los conventos destacan a mi gusto dos lugares que se pueden visitar, y lamentablemente no sacar fotos, las Catacumbas, con todos sus pasillos, tumbas y osarios repletos de huesos, donde se enterraron alrededor de 70.000 personas hasta que para evitar pestes y epidemias, el Libertador General San Martín prohibió su uso. Y la Biblioteca, con libros desde la época de la llegada de los Españoles, pintoresca y la segunda más importante del Perú según me comentaron.
  • Pachacamac (PEN 8): Era un antiguo recinto religioso y ceremonial Wari alrededor del año 500 a.c., luego utilizado por los Incas. En la actualidad se puede recorrer todo el complejo pero siguiendo un circuito limitado, donde destacan a mi gusto y por su grado de conservación el Templo del Sol, el Templo Pintado, las dos Pirámides con rampas, la calle Norte-Sur y sobre todo por su nivel de restauración el Palacio Inca de Mamacuñas o Acllawasi, que era el lugar donde se alojaban y educaban las mujeres elegidas, muchas de las cuales, supuestamente luego eran sacrificadas. Para llegar hasta las ruinas hay que tomar unos buses en la parte bajo tierra de la avenida Grau, mejor preguntar preguntar, pero estos buses son blancos con franjas en distintas tonalidades de marrón en el medio, cuestan PEN 3,5 y tardan entre hora y hora y media en llegar hasta el complejo, que se encuentra 1km antes del pueblo con el mismo nombre.
  • Huaca Pucllana (PEN 10): Era un gran centro ceremonial elaborado por la cultura Lima entre los años 200 y 700 a.c.. La verdad es que impresiona por su antigüedad, dimensiones y porque fue elaborado todo con pequeños bloques en fila de abobe, y por la forma que presentan se los llama librerías. Está dividido en dos secciones, la administrativa compuesta por plazas que se utilizaban para reuniones públicas y la sección ceremonial, donde destaca la gran pirámide de barro o adobe. Su religión estaba basada en el mar, por eso en las vasijas se ven representaciones de olas y tiburones bicéfalos. También celebraban banquetes donde el tiburón era el plato principal, se rompían vasijas y se sacrificaban mujeres y niños. Detrás de la tienda de recuerdos, tiene una parte curiosas, con pequeñas cuevas adosadas contra la pirámide, donde enterraron a inmigrantes chinos según su costumbre entre los Siglo 19 y 20.
Por falta de tiempo y porque quería seguir avanzando no visité más lugares, entre ellos el Museo Larco, pero quedará para la próxima oportunidad :).
El lío pincipal en Lima, para moverse en larga distancia, es que no hay un terminal terrestre para todas las líneas de autobuses y cada empresa tiene la propia. Entonces según a donde uno vaya o con quien se quiera viajar toca ir a un sitio distinto. En mi caso me toco en los dos casos por el Estadio Nacional (Cromotex y Móvil Tours).
Luego de visitar la capital me fui para Huaraz (PEN 50, 8 horas) a seguir recorrido e intentar hacer algo de montaña.

lunes, 1 de noviembre de 2010

En Cotahuasi y Toro Muerto, disfrutando tranquilo

Petroglifos de Toro Muerto, Corire, Arequipa, Perú


Como decía en otras publicaciones, usando Arequipa como base, me fui a hacer el que dicen es el tercer cañón más profundo del mundo, el Cotahuasi. Pero como hay entre 9 y 12 horas de bus que separan ambos lugares, antes quería visitar los Petroglifos de Toro Muerto y de yapa vi unas huellas de dinosaurio, así que este post es algo extenso explicando todo.
Mi primer destino fue Corire, a 3 horas de Arequipa (PEN 10). En Información turística me dijeron que sólo había un bus hasta a la mañana a las 5, pero en realidad hay cada 50 minutos desde las 5, así que ya que estaba despierto y en la terminal, me lo tomé a esa hora desde el Terrapuerto (empresa Carpio). Llegué a Corire tipo 8 y hay dos opciones, ir directamente a Toro Muerto en un Taxi que sale entre PEN 20 y 30 y te espera una hora. O ir por libre, tomarse un taxi hasta "La Candelaria" que sale sólo PEN 5, pagar la entrada (PEN 4) y con la amable explicación de quienes trabajan ahí (y además me permitieron dejarles mi mochila), subir por la montaña y caminar 20 minutos hasta que comienza la distribución de Piedras y disfrutar del lugar todo el tiempo que se quiera, yo en mi caso opté por la segunda alternativa.
Toro muerto es quizás la zona más rica del mundo en arte rupestre, abarca unos 5 kilómetros cuadrados, y en este mar de piedras distribuidas en un desierto de arena, hay más de 2200 bloques grabados por sociedades locales, desde Wari (700 b.c.) hasta los Incas. Las representaciones son diversas pero van desde figuras geométricas (por ejemplo, zig zags que representan el agua), a antropomórficas, o animales como felinos, llamas, cóndores, víboras, etc. Cuando llegué estaba completamente sólo, recién cruce tres grupos de gente al final y estuve ahí alrededor de 4 horas viendo las diferentes figuras representadas en las piedras. Es un lugar muy caluroso, seco, lleno de arena y sin servicios, por lo que es recomendable, además de la cámara, llevar bloqueador solar, agua y algo de comida. A nivel petroglifos y arte rupestre, lo mejor que he visto, además del sinfín de bloques grabados, hay diferentes figuras, que siguen distintos patrones. Creo que un lugar increíble, que merece la pena ser conocido para los interesados en el tema. Ya cuando estaba volviendo, fui por mi mochila y ahí me crucé con un grupo de 5 locales con los que había hablado antes recorriendo el lugar. Me ofrecieron llevarme en su camioneta de vuelta a Corire, venían contentos, haciendo chistes con una pequeña víbora que habían atrapado en una botella de plástico. Así que almorcé un plato con los camarones de río típicos de la zona con dos de ellos en un bar de la esquina de la Plaza de Armas, con la pobre viborita de centro de mesa, y después nos despedimos, ellos a trabajar y yo en combi hasta Querulpa a ver huellas de dinosaurio.
Las Huellas de Dinosaurio de Querulpa fue la yapa que no esperaba, me lo dijo quien me cobró la entrada y me cuido la mochila en Toro Muerto, y como el bus a Cotahusi no pasa hasta las 19hs, una excusa para visitar el lugar y matar tiempo. Una camioneta desde Corire hasta ahí tarda 15 minutos y cuesta 1 Nuevo Sol. No es nada asombroso, pero la entrada es gratuita, hay que subir unos 800 metros, hasta una especie de rectángulo con unas cuantas huellas muy claras y un mirador para apreciarlas, que además tiene unas vistas del valle muy buenas. Luego me volví a Corire a esperar el bus, que terminó pasando por la plaza a las 19.30 (PEN 20).
Corire además de ser famoso por Toro Muerto, lo es por sus camarones de río que se pueden degustar en un montón de restaurantes del lugar, y es una zona de gran producción agropecuaria. Justo cuando estuve era la época de recolección de la papa / patata, así que a la noche estaba lleno de camiones levantando cargamento, lo que nos retrasó algo con el bus. Y me comentaban que comenzaba la época del arroz, así que estaba preparando parte de los campos para ese cultivo.
Llegué a Cotahuasi a las 3 de la noche, me busque un hostal barato y ya que venía durmiendo poco, decidí hacer dos noches en la población antes de bajar con mi carpa / tienda hasta el cañón.
El primer día dejé la mochila en el hostal y habré caminado unos 19 kms, recorriendo la zona al Este. Es fácil preguntándole a la gente que es muy amable, así que en parte por ruta en parte por caminos rurales me fui primero hasta el otro lado del río, a las Ruinas Arqueológicas de Collota, donde quedan vestigios de una ciudadela Pre-Incaica. Luego siguiendo en el mismo margen del río fui hasta Taurisma, una pequeña localidad, donde destaca la antigua iglesia y los árboles de su plaza, que dicen fueron de los primeros plantados por los Españoles en Perú. Después de pasar por Taurisma pasé del otro lado del río y me fui caminando por la ruta hasta Tomepampa, otro pueblo bastante pintoresco, donde me quedé un rato hablando con la gente local antes de hacer los 9kms de vuelta a Cotahuasi. Hay combis que conectan las poblaciones, pero los horarios son muy limitados, así que es mejor averiguarlos antes de planificar travesías de mayor distancia. Igualmente en todo momento me fui cruzando con gente local, como curiosidad van casi todos con radios viejas colgando como morrales escuchando música y son muy amables, además de darte charla te van orientando y recomendando cosas.
Cañón de Cotahuasi, Arequipa, Perú
El segundo día ya fui con la mochila a recorrer mejor el cañón, hice en total alrededor de 25kms. Primero los 11kms que hay hasta las Cataratas de Sipia y me fui a contemplarlas. Hay que bajar desde la ruta (esta bien señalizado) y se puede ver un salto de 150 metros, estuve ahí un buen rato disfrutando, descansando y comiendo algo. Después volví a la ruta y pase por Chaupo y los bosques de cactus de Rosario Pampa y Judio Pampa, para llegar hasta donde se termina la carretera y hay un puesto de donde salen los buses (dos por día). Le pregunté a una mujer (la primer persona que veía desde Sipia) como seguir, porque hay dos senderos, el que sube va hacia Velinga (dicen que es el punto más bajo de cañon, pero está elevado) y el que baja, que tomé yo y va hacia el punto más bajo del Cotahuasi y a los Baños Termales de Niñochaca. Así que caminé unos 50 minutos más, tranquilo, siguiendo el río, primero dejé atrás un puente colgante (no hay que cruzarlo), luego por unas casas y después iba buscando un lugar para acampar por libre junto al río cuando llegué a una pequeña pileta / piscina de piedra, cubierta con un techo de hojas y con aguas termales. Desde el puesto del final de la ruta que seguía sin ver a nadie, así que deduciendo que eran los Baños de Niñochaca, estuve una hora sólo y tranquilo, relajando los músculos después de la caminata. Justo cuando iba a salir tipo 5, pasaron unos chicos que venían de la escuela y se sorprendieron a ver a un "gringo", ahí recostado, relajado, disfrutando del agua. Me quedé un rato más, agarré mis cosas y me fui a acampar a 50 mts, a un lugar que ya había visto con una pequeña playita, al lado del río.
Pasé la noche completamente sólo, al lado del río disfrutando del paisaje y el entorno y al otro día a la mañana me volví al puesto donde comienza la carretera, de ahí sale un bus a las 9 que va a Cotahuasi (PEN 5). Lo único en esta parte del cañón, al menos es esta época del año no hay arroyos ni pequeñas cataratas que se crucen en el camino, así que hay que llevar suficiente agua y/o purificar directamente la del río, como hice yo.
Ya en Cotahuasi justo había una feria anual tradicional y gastronómica de los pueblos del cañón (me lo había dicho en Turismo de Arequipa). Me vino perfecto porque los buses de vuelta no salen hasta las 16.30, así que estuve caminando algo más por los alrededores, disfrutando de platos típicos, viendo danzas tradicionales y a la tarde me tomé el autobús para volver a Arequipa a las 3 de la mañana (PEN 32).
Comparando con el Cotahuasi con el del Colca, y salvando las distancias es como Machupichu o Choquequirao. Colca es más turístico y los paisajes impresionan más por los coloridos de las terrazas. Cotahuasi es más seco y árido, más profundo, pero también mucho menos turístico y más barato (no hay que pagar entrada). Como la gente no está tan acostumbrada, es muy curiosa y más que amable con los visitantes, también es muy seguro según me dijeron en turismo para acampar en cualquier lugar por libre. Y como plus uno puede estar horas completamente sólo, disfrutando de este maravilloso entorno. Lo malo es que está a más distancia de Arequipa, ese es un motivo por el cual no es tan visitado, y la ruta es mucha más dura, el bus que tiene horarios poco cómodos, baila bastante subiendo y bajando montañas por caminos de tierra, por lo que a veces la gente se marea.

Juanita y el Monasterio de Santa Catalina

Monasterio de Santa Catalina, Arequipa, Perú
Desde Cusco llegué a Arequipa, quería conocer la cuidad y usarla de base para visitar dos de los cañones más profundos del mundo: Colca y Cotahuasi. Finalmente visité ambos pero lo contaré en otros post.
La parte central de Arequipa, es turística y como me pasó con Cusco, la encontré muy prolija y cuidada, sobre todo en los alrededores de la Plaza de Armas. Me alojé en un hostal barato a 100 metros al sur de la plaza y comencé a callejear y caminar bastante, pasando casi todos los días como ya es mi tradición, por el mercado central.
La parte central de Arequipa es muy agradable para caminar y moverse. Entre otros lugares visité la Catedral, la Iglesia y el Antiguo Claustro de la Compañía, pero sobre todo quería destacar dos sitios: El Monasterio de Santa Catalina y el Museo Santuarios Andinos.
El Monasterio de Santa Catalina de Siena es un lugar muy particular que uno no se puede perder, la entrada cuesta PEN 35 y se puede permanecer recorriendo esta pequeña cuidad amurallada, si lo desea, hasta la hora de cierre. Los Martes y Jueves cierran más tarde, alrededor de las 21hs y las visitas nocturnas son un espectáculo aparte, ya que gran parte del recinto se ilumina con velas, faroles y el fuego de los hornos de barro. Tuve la suerte de entrar un Jueves y lo visité de noche, lo único, cometí el error de entrar a las 6 de la tarde y me perdí la parte de día para las fotos. Creo que lo ideal es ir tipo 4 o 5 de la tarde y ver el lugar con sus dos caras, la diurna y nocturna. El monasterio es de 1579 y se encuentra construido con "sillar" (roca volcánica), por lo que es una muestra importante de la arquitectura colonial Arequipeña. Como decía antes es una pequeña cuidad amurallada, con paredes internas en colores muy vivos como rojo o azul y entre otras estancias, celdas privadas donde las religiosas desarrollaban sus vidas de clausura. Luego de los terremotos de 1958 y 1960 fue restaurado, y desde 1970 se puede visitar gran parte del complejo. Además de los patios, celdas y la actual pinacoteca a mi me llamó la atención la zona de la antigua lavandería con tinajas, las cocinas y la bañera.
También fui al Museo Santuarios Andinos (Entrada PEN 15, no se permiten fotografías), famoso por la momia de "Juanita, la niña de los hielos", que fue ofrendada a la Montaña Sagrada Inca donde fue hallada en 1995, el volcán Ampato. Además de Juanita, se han encontrado otros 17 cuerpos que están siendo estudiados. Se exponen parte de los hallazgos rescatados, el ajuar y la vestimenta de algunas de las momias y al final, en una cámara criogénica se puede ver a Juanita. Comparándola con los niños de Llullaillaco, en el Museo de Arqueología de Alta Montaña de Salta (que es bastante similar), no se encuentra en un estado tan bueno de conservación. Quizás se deba a que cuando se encontró la momia, esta se había caído de su posición original al interior del cráter del volcán, y una parte del cuerpo estaba al descubierto. Pero la visita a este lugar es más que interesante, instructiva e impresiona ver un cuerpo de tantos años en ese estado.
Desde Arequipa me voy para Lima (PEN 90, 17hs) a seguir conociendo.